sacada del horno. Al realizar el corte
sale un ligero vapor. El azúcar y las especias-canela- quemados en la corteza.
Pero lleva gafas oscuras
en la cocina a las diez
de la mañana -todo tan sutil-
mientras me observa tomar
un bocado, acercarlo a la boca
y soplar. La cocina de mi hija,
invierno. Pincho el trozo de tarta
y me digo a mí mismo que no debo meterme.
Ella dice que le ama. No
podía ser peor.
Mi hija y la tarta de manzana, Raymond Carver.
Random House Mondadori organiza junto a Con las zarpas en la masa un concurso cuyo objetivo es elaborar recetas con restos de pan o bollería.
Si estoy en Asturias, los domingos me gusta ir a por los bollos suizos recién hechos de la confitería Viña en Piedras Blancas. No suelen quedar restos, pero reservé un bollo para elaborar este budin de suizo con compota casera y avellanas caramelizadas.
Ingredientes (para 2 moldes individuales):
- 1 bollo suizo.
- leche para cubrir el bollo.
- anís.
- 1 cucharada de agua y tres de azúcar para hacer el caramelo.
- 2 huevos pequeños batidos.
- compota casera de manzana y canela.
- un puñado de avellanas.
Dehacemos el bollo suizo y lo dejamos cubierto de leche para que empape bien. Como me gusta mucho el sabor anís en la bollería le añadí unas gotas.
Hacemos el caramelo calentando el agua y el azúcar hasta que adquiera un color de "tofe" y la textura propia del caramelo. Lo ponemos en el fondo de los moldes.
Escurrimos bien el bollo y conservamos la leche que mezclaremos con los huevos batidos.
Cuando el fondo de caramelo esté frío y solidificado, disponemos a capas la miga del bollo y la compota. Rellenamos los moldes con la mezcla de leche y huevo batido y horneamos a 200º . Para hornear, colocamos los moldes en una fuente con un fondo de agua (que cubra aproximadamente 2/3 de los moldes).
Dejamos enfríar antes de desmoldar.
Caramelizamos las avellanas. Volvemos a hacer un caramelo y añadimos las avellanas . Coronamos los flanes con las avellanas.